10. Laura

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Laura Terciado Podcast

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Laura Terciado es periodista pero sobre todo, fotógrafa. Solo hace falta darse una vuelta por su web o su Instagram para disfrutar de la belleza de sus fotos. Pero además de realizar un trabajo impecable, es una persona genial con la que hablar y tener una conversación enriquecedora es sencillo y un pedazo de placer.

Yo: Bueno, lo primero, que siempre me enrollo: ¿Quién eres ahora mismo?

Laura:¡Soy Laura Terciado! (Risas) No lo sé…¿Cómo se responde a esto? Soy Laura Terciado.

Yo: ¿Qué haces con tu vida?

Laura: Qué hago con mi vida…Me he cruzado contigo y nos hemos puesto a hacer una entrevista…Ehmmm yo soy periodista de estudios, pero siempre he estado con el audiovisual. Soy fotógrafa de corazón…

Yo: De corazón y de verdad.

Laura: Bueno, fotógrafa de corazón y de verdad pues bueno, a medias. Y luego laboralmente soy Community Manager en un programa de televisión.

Yo: Mujer y medios audiovisuales. Así alguien que está metida en los medios, como tú, que eres periodista, que encima eres Community…¿Cómo estamos?

Laura: Creo que hay aspectos en los que estamos muy bien y aspectos en los que estamos muy mal. Sobre todo porque una parte, que es la de la imagen, creo que está cambiando a medida que cambia la sociedad en sí.

En la tele, en las series…Ahora hay más protagonistas de películas feas, que antes no veías una fea protagonizando una película de Netflix. Ahora sí.

Entonces en eso no estoy excesivamente preocupada. Porque veo que cambia y cambia mucho. Y dentro de la tele, yo estoy muy contenta. Porque sí que me ha costado más en la foto, porque te miran más como “¡Ay! ¡Una chica tonta con una cámara! ¿Qué hará?” pero en la tele no. Yo en la tele siempre he tenido la mayoría compañeras, he tenido jefas casi siempre…Aunque sí que es verdad que en las altas esferas es más complicado encontrarte con una mujer.

Yo: ¿Todavía sigue ese estándar en la fotografía del “Señor fotógrafo” que juzga y tal o hay un caminito que se está rompiendo?

Laura: Se está rompiendo porque yo creo que las redes sociales nos han ayudado un montón a abrir la mente en cuanto a eso. A mí no me ha extrañado en ningún momento. Sí que es verdad que cuando eres más joven pues eso, ves a Kappa, a Disneu, a todos estos…y no ves a una mujer nunca. Luego está García Rodero, Isabel Muñoz…que sí que han despuntado bastante, pero eran como las raras. En ese tipo de fotografía puede ser que sí todavía no haya tantas mujeres, pero luego en fotografía artística por ejemplo no. Yo sigo a un montón de mujeres en IG que me han saltado sus fotos sin saber si era mujer u hombre. No notas la diferencia cuando te pones a mirar el feed de alguien.

Yo: O sea, que podemos estar ahí.

Laura: ¡Estamos ahí! ¡Claro tía! Muchas veces igual que la ilustración. Tú estás viendo un libro, ves una ilustración que te llama la atención y de repente puede ser de un hombre o una mujer. Con la foto artística creo que pasa lo mismo.

Yo: ¿Pero a ti no te pasa que a veces sientes como que hay ese doble…como que tienes que ser más buena que un equivalente chico.?

Laura: No ,ya no.

Yo: Pero ¿alguna vez has sentido ese doble juicio? No por ti en plan que te afecte, sino de decir “se nos permite menos fallar que a un pavo”

Laura: Creo que pasa, pero yo en mi vida laboral no lo he sentido.

Yo: A mí en empresas y tal no, me ha pasado más cuando he ido a cubrir cosas o cuando he trabajado en plan más freelance y eso sí.

Laura: Puede ser. Yo es que ya no lo veo tanto. Sí me parece que hay en ámbitos como en la información, cuando trabajas en un informativo de televisión sí, sí lo veo. Pero ya en lo nuestro no. A lo mejor en el ámbito business sí es más complicado.

Yo: ¿Crees que el identificarte como feminista en plan de dejar ver de qué pie cojeas es bueno, malo, necesario, no necesario…?

Laura: Creo que es necesario, Pero creo que es necesario hasta el punto en el que tú quieres reivindicar algo. Es como ser homosexual. Yo soy pro derechos homosexuales, obviamente, tengo mi pareja…pues eso, soy bollera. Pero no necesito que la gente lo sepa, pero a mí si pasa algo con mi colectivo que me indigna o que necesito reivindicar, por supuesto que lo voy a hacer públicamente. No tengo ningún problema. Pues igual en el feminismo.

Yo creo que sí que es verdad que son muy necesarias las activistas pero yo no necesito todo el rato mostrar eso. Pero sí me parece por ejemplo en la ilustración se ve mucho en las redes: “¡Vamos a hacer un Inktober feminista” se ve mucho, se mueve más, pero en fotografía es más difícil, sobre todo en la fotografía artística, porque explicar conceptos hay veces que puede ser repetitivo y parece un anuncio.

Yo: Quizá entonces es más la evitación de ciertos roles machistas y tal más que el tener que…vamos, que no es hacer, sino dejar de hacer ciertas cosas.

Laura: Sí y sobre todo tener las cosas muy claras. Yo nunca he visto diferencias entre ellos y yo. Si he visto diferencia ha sido personal. También pienso que hay tías que son peores que yo y tíos que son mucho mejores que yo. Pero hay otros que no. Y yo si voy a por algo…tienes que ir con eso ¿no? Con el “yo soy la mejor” Mejor que tú, que tú y que tú. Seas un tío o seas una tía. Entonces a lo mejor yo no me he encontrado con ese tipo de trabas porque yo voy con esa actitud.

Yo voy a una cola de una entrevista de trabajo y veo a chicos y veo a chicas y…

Yo: Que te la suda muchísimo (risas)

Laura: Como si veo a una chica y a 15 tíos. Es que yo pienso que son competencia. Yo no pienso en plan “¡Oh dios míos! ¡Son todo hombres!” ni se me pasa por la cabeza.

Yo: Pero tía, porque yo creo que tienes un carácter tan tocho que es como que te la suda todo en plan…hay 15 tíos y 3 tías pues palante.

Laura: También es verdad que siempre he estado rodeada de mujeres muy poderosas. He de decirlo. Mi madre es una tía que ole su coño, que tiene mucho carácter y siempre ha sido la que ha manejado mi casa, porque estábamos solos mis hermanos y yo con ella. Entonces ella era como pues eso, la fuerza mayor. Luego he tenido profesoras, he tenido jefas en el trabajo entonces yo siempre no he identificado a la mujer con estar abajo.

Yo: ¿Tú dirías que eres quien eres por las mujeres que se han cruzado en tu vida?

Laura: Sí, total. Pero también es verdad que hay casos y casos. Yo he tenido mucha suerte o mucha desgracia porque los referentes masculinos en mi caso han sido escasos y algunos han sido malos, entonces como que siempre era como: “pero ahí hay una mujer estupenda”.

Yo: La experiencia da la razón en el sentido de que hace falta referentes mujeres porque al final inspiran.

Laura: Total.

Yo: Es como cuando te encuentras con una muejr que dices “¡Guau! Me inspira cosas  guays” que también pasa con un hombre pero con una tía pues es ese sentimiento de identificación.

Laura: La sororidad está ahí por algo. Pero también es eso. Yo no soy feminista por las cosas que me han pasado. La reacción es como cuando vives en una familia de derechas, que al final aunque no pienses así es como de derechas y votas al PP y nadie entiende nada. Pues esto es igual. Hay mujeres que hemos sido machistas mucho tiempo sin darnos cuenta. Y no nos indignaban ciertas cosas. Encima eres bollera y haces bromas, como si fueras un tío. Y a mí fueron en especial dos personas con las que trabajé que me dijeron “¡Chs! ¿Qué hablas? Toma, léete este libro” Y me corregían cuando hablaba. Me dieron libros, me dieron de todo. Toda la información.  De hecho mi amiga Clara, que trabaja en Freeda, me dio una lista de libros. Sí que he tenido mucha suerte en ese aspecto.

Yo: Yo creo que todas tenemos como ciertos referentes o ciertas mujeres que nos han marcado y dices “la llegada de esta persona a mi vida me hizo cambiar el chip” Porque yo me leo frases de mi yo de hace 7 años…y hasta luego.

Laura: Es que esa es la parte en la que hay que ser activa. En la conversación con la gente. Porque sí que es verdad que el arte promueve mucho y ayuda mucho que se cambien las series y de repente haya más mujeres, las protagonistas de repente son ellas…Ese tipo de cosas nos ayudan y sobre todo con las mentes más fáciles de amoldar pues como que siguen la corriente. Pero hay gente que tiene la cabeza mucho más dura y a esa gente hay que convencerla. Y hay que hablarles. Porque esa gente se mete en Instagram y dice “¡Qué coñazo! Dejar de seguir, dejar de seguir, votar a Vox…” pero si tú les hablas…Yo he hablado con muchos amigos de decirme “Es que yo no soy ni machista ni feminista” y salir del bar diciéndome que era feminista y no se había dado cuenta. También es verdad que hay otra gente con la que no puedes.

Yo: O hay otro día que no te apetece hacer pedagogía.

Laura: Otras  veces que discutes y a mí me pasa muchas veces que dices: “¡No! Es que te parto la cara”

Yo: Y es que además tú entras mazo al trapo ¿no?

Laura: (Risas) Sí, mucho. No puedo evitarlo. Entro mucho al trapo y además es que me emociono y me enfado. También es verdad que entrando así al trapo me he tragado muchas veces mis palabras y he aprendido mucho.

Yo: También creo que cada persona tiene como su manera de luchar. Hay gente que es más sutil, hay gente que es más vehemente, gente que no le cuesta salir a la calle a gritar y otra gente que no le cuesta hacerlo en su circulito. Pero sí que creo que hay mucho trabajo del día a día. De visibilizar. Lo que pasa que a veces es tan cansado…O sea a veces cuando tienes que bajar a ciertas cosas en plan de “¿Y por qué si hay un Día de la Mujer no hay un Día del Hombre?” y es como…mañana te lo explico.

Laura: ¡Ay! Pero te tienes que reír.

Yo: Ya tía, pero hay veces que es como…mañana te lo explico. Porque llevo un día en el que he pillado atasco, me he levantado tarde y lo último que me apetece ahora es explicar.

Laura: (Risas) Es como “Nooo. Cállate”

Yo: Yo sí que soy optimista. Más que optimista, realista y creo que hay razones para…

Laura: Sí y que siempre va a haber gente en contra de todo. Siempre. Todo el rato. Pero eso no evita que las cosas pasen. También que es normal, llevamos un bagaje…enorme.

Yo: ¿En qué sentido?

Laura: A lo largo de la historia echándonos más piedras para someter más tiempo. Que se lo digan a una persona de otro color de piel, como les ha pasado. “Pues yo tengo amigos negros” pero es que hace 200 años no tenías amigos negros y estaban en la puerta del bar porque no podían entrar. O no había. Entonces con las mujeres ha pasado lo mismo. Y encima la Iglesia dijo: “¡A fregar todas ya! ¡La fea a monja! ¡La bollera monja! ¡La rara a monja! Y tú bruja, quémala y el resto a parir y a fregar” Entonces ha pasado mucho tiempo, entonces hemos evolucionado hasta cierto punto en que los hombres han dicho: “¿Qué hacemos?”

Porque eso es verdad. Las mujeres por mucho que hubiésemos gritado, si no hubiera habido hombres que hubiesen dicho: “¿Qué coño estoy haciendo? Que es igual que yo.” No nos hubiesen dejado. Porque eso es así. No nos hubiesen dejado evolucionar.

Yo: Es importante que haya tíos feministas.

Laura: Por eso hay que hablarles a ellos. Y decirles: “Oye, que no es que yo crea que somos iguales. Es que somos iguales de verdad. Date cuenta.” Hay muchísimos hombres feministas y son maravillosos. Porque saben lo que son y no tienen ningún conflicto de identidad. No. Sienten lo mismo que nosotras y lo entienden igual que nosotras. Y hay mucha gente de nuestra edad que piensa como nosotras. A mí se me acercan muchos diciéndome: “Es que me da un poco de cosa decir que soy feminista porque es como que me estoy apropiando de vuestra lucha” No, tío. Es que estás dentro.

Yo: Sí. Yo creo que no tienen que liderarla porque yo cuando el 8M vi a tíos que decían “¡Vivas nos queremos!” era como…A ver.

Laura: Relájate.

Yo: Claro. Está genial pero igual que yo no voy a ir a una manifestación de negros y voy a decir “Basta de tal” porque no creo que sea mi espacio. Pero sí que creo que son necesarios en la lucha como parte de la sociedad.

Laura: Además estás ahí apoyando. A mí me encantó ver tantos tíos en la manifestación.

Yo: Yo creo que además el feminismo tiene que ser tan trasversal…Tiene que estar en todo y de todo de todos sitios de todo el mundo.

Laura: Pero está entrando y además, lo siento por lo que voy a decir, pero tenemos la suerte de que se haya puesto de moda.

Yo: Hay mucha gente que está en contra de eso pero yo también lo creo.

Laura: Igual que la homosexualidad. Yo tengo una suerte que te cagas de haber tenido la casualidad de caer en un punto de la historia en el que ser lesbiana estaba como bien visto. Era como guay. Te quitabas de muchos problemas. Porque yo he nacido en una ciudad muy pequeña, muy de derechas y muy horror en la que yo lo tenía totalmente bloqueado. No, yo no soy. Que no, que no, que no. Y de repente dije…pues a lo mejor sí. Llegué a Madrid y era todo Chueca, felicidad, estupendo, el Orgullo y dije qué guay. Y ahora los chavales que ponen Netflix y en cualquier serie salen lesbianas o salen gays. Es como que no tienen ningún tipo de conflicto. No tienen esa sensación de: “Estoy solo”.

Yo: A mí también me pasó en su momento de pequeña el estar convencida de que yo nunca podría tener pareja. Como que eso no era para mí. Como que no ves nada.

Laura: Y que tampoco lo puedes hablar con nadie. Si lo hablas es como con un amigo muy amigo o una amiga muy amiga.

Yo: Porque no sabías que existía.

Laura: Exactamente. Yo veía movidas en internet, pero en internet que teníamos, que levantabas el teléfono y se oía “ninonino” y tu madre te decía: “¡Llevas una hora! ¡Desconéctate!”

Ahora a patadas. Tú pones en Google: “Soy gay” y te salen millones de cosas y un chaval de 13 años puede leerlo. Puede ver que hay millones de personas como él. Que no le pasa nada. Con el feminismo es lo mismo. Estás metida en tu burbuja y de repente lo ves.

Yo:  Yo creo que además es súper necesario que haya esa expresión multitudinaria. Que se vea una foto de muchísima gente. De la masa. Como que sea un movimiento muy grande. Yo sí que creo que es bueno…tampoco que se mercantilice y haya camisetas de Inditex pero si eso sirve para que…

Laura: Es que así llegas hasta los últimos rincones.

Yo: Claro, si eso sirve para que se expanda, pues palante.

Laura: Aún así coincidimos en que es una parte mala.

Yo: Repartir carnets a mí me parece que es un poco atraso en plan de “Yo soy más feminista que tú porque llevo militando desde el 2000”

Laura: Y tú solo llevas una bolsa de El Corte Inglés.

Yo: Claro. Porque igual la que lleva la bolsa de El Corte Inglés tiene el poder de cambiar leyes.

Laura: Y que tampoco es una competición de ver quién es más feminista. Es decir, tú llevas dos días pero hola, bienvenida. Gracias. Trae gente contigo.

Yo: Hacia dónde crees que va todo esto. Así como para hacer un vaticinio. 

Laura: Pues no lo sé. Hace 10 años estábamos fatal. Hace 20 años era horroroso. Cada vez los plazos de avanzar son más cortos. Creo que el progreso va muchísimo más rápido. El machismo va a seguir siendo un problema, pero yo creo que me voy a morir y voy a ver esto superado.

Yo: ¿Tú crees?

Laura: Tía tengo 29 años.

Yo: (Risas) No lo digo porque te vayas a morir.   

Laura: (Risas) ¿Te imaginas? Ahora te vas y me encuentran aquí muerta. No pero te prometo que lo creo. Vamos a ver, mi madre no es mayor y ella con mi edad no veía ni de lejos, ni de lejísimos como estamos ahora. Que yo le cuento: “Pues mira, estoy viviendo con una mujer y nadie nos va a decir nada. Voy a tener un trabajo normal. Una vida normal. Voy a tener amigas que son como yo.” y no se lo cree. Dentro de 20 años va a ser totalmente distinto.

Yo: Ojalá

Laura. ¡Parfavar! Que sí tonta, te lo prometo.

Yo: ¿Hay algo más que quieras añadir?

Laura: Que estoy muy bien y muy contenta.

Yo: Y que dentro de 20 años irá todo mejor.

Laura: Y seremos todos feministas y el feminismo a lo mejor deja de existir porque ya no hace falta. ¡Qué fantasía!

Yo: ¡Pfffff! Se te está pirando muchísimo. Pero está bien, me gusta la gente optimista.

Laura: ¡Qué loca tío!